viernes, 4 de diciembre de 2015

SPAGHETTI DE CALABACÍN CON PUERROS Y GAMBAS.



Hace tiempo que tenía pendiente  hacer esta receta que había visto en varios blogs y publicaciones de Internet, pero pensaba: - ¿¿¿espaguetis de calabacín??? si claro, y ¡qué más!


Pero con esto que MasterChef ha puesto de moda los trampantojos (engañar al ojo) culinarios, me dispuse a probarlos y oye, qué éxito, me gustan mucho y los estoy haciendo bastante a menudo con combinaciones de todo tipo.


Aquí os presento quizás una de las más sofisticadas, veamos el paso a paso.


INGREDIENTES:

  • Dos calabacines.
  • Un puerro hermoso.
  • Una cebolla.
  • Un par de dientes de ajo.
  • Un tomate.
  • Langostinos o gambas.




Haremos un sofrito con la cebolla, los puerros, el tomate y el ajo, para ello rallamos todos las verduras, a excepción del puerro que lo cortaremos en rebanadas.






Salpimentamos y cocinamos a fuego lento para que no se nos queme, si veis que se os pega, vais añadiendo unas gotitas de agua mientras se cocina; yo por comodidad y resultado uso una freidora sin aceite (Cecofry), aquí veis el resultado:



Y ahora, el QUID de la cuestión, preparar el calabacín, la verdad es que es mucho más sencillo de lo que parece.


Primero lo pelamos para quitarle la piel y que el resultado sea mucho más parecido a los espagueti de verdad, se puede hacer con un cuchillo pero es mucho más cómodo con un pelador.


Y ahora, la estrella invitada, UN PELADOR EN JULIANA en la tienda los habían mucho más sofisticados, pero como no estaba segura si me iba a gusta el plato, por 1,50€ me llevé este a mi casa y doy fe que funciona rápido y bien, de momento no lo cambio.

Nota: Cuando hagáis los calabacines, no hay que llegar al corazón del mismo, la parte que tiene las semillas no es apta para hacer las tiras.



Fijaos en el resultado, es espectacular:



Hacemos a la plancha las gambas peladas, también cocinamos algunas sin pelar que reservaremos para adornar el plato.

Como veis yo uso un Wok porque ya sabéis que me pierden los gadgets de cocina, pero perfectamente podéis usar una sartén.




Salteamos las tiras de calabacín, unos minutos serán suficientes ya que tienen que quedar "al dente".


Nota: Un muy buen consejo de Maria Martinez es no poner sal a las tiras de calabacín hasta que están en el plato, si añadimos sal estando estas en la sartén, estás se ablandan y empiezan a soltar agua arruinando la textura del plato.


Una vez salteados los calabacines, solo nos queda montar el plato:

Hacemos una cama con los calabacines y los salpimentamos, añadimos el sofrito de puerros y las gambas peladas, por último adornamos con las gambas enteras.




Como los tiempos de cocción son cortos (a excepción del sofrito del principio) el plato se cocina en un santiamén, el truco está en hacer TODOS los pasos mientras el sofrito está cocinándose.


Espero que la hagáis, vale la pena :-)




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viernes, 13 de noviembre de 2015

SALSA DE TOMATE CASERA (PASO A PASO Y ENVASADO AL VACÍO).

La salsa de tomate le añade alegría y una nota de color a cualquier plato, el problema es que la que encontramos ya envasada, suele tener azúcar, aceite o ambos.



Un pollo a la plancha o unas salchichas, se convierten en un plato mucho más rico si añadimos salsa de tomate, para la boloñesa o la pizza es un ingrediente imprescindible y si se la añadimos a un bocadillo de atún, el resultado es espectacular.


Es fácil de hacer pero seamos realistas, no se hace en un momento,así que lo ideal es hacer mucha cantidad para olvidarnos de volver a hacerla durante una buena temporada.

Vemos el paso a paso:

Lo primero es escoger bien los tomates, maduros y brillantes, déjate aconsejar por tu frutero. Yo uso tres kilos.

Necesitaremos también, dos cebollas, tres dientes de ajo, un pimiento rojo, aceite de oliva, sal, sacarina y maizena.





 Ponemos un par de cucharadas de aceite de oliva en una cazuela y sofreímos el ajo y la cebolla (No te preocupes por usar aceite en esta receta; puesto que hacemos salsa para muchos muchos días, la cantidad de aceite que consumiremos es inapreciable)





 Una vez hecho el sofrito, añadimos los tomates troceados y el pimiento.





Añadimos sal y un chorrito de sacarina para quitarle la acidez al tomate.





Para facilitar el proceso de cocción yo le paso una batidora, es mucho más rápido hacerlo así que rallar el tomate, además que ensuciamos menos.




Una vez triturado nos queda tal que así




Y ahora si, fuego lento durante 45-50 minutos, mucho mejor si lo dejamos tapado, se concentran más los sabores y no salpica, si lo haces sin tapar corres el riesgo de que tu cocina se quede estilo matanza de Texas y no queremos eso.


Como a mi me gusta con una textura muy fina, una vez cocinado, vuelvo a triturar y lo cuelo (si a ti te gusta con textura puedes saltarte este paso y dar por finalizada la salsa).




La textura resultante es demasiado liquida para mi gusto, así que la espeso añadiendo 1 cucharada de maizena que previamente he disuelto en un vaso de agua fría, ya que si la pones directamente en las salsa caliente te hará grumos (recuerda que podemos tomar una cucharada de maizena al día y que esta salsa es para muchos, muchos días, así que yo ni la contaría como tolerado)





Y llévala a ebullición para que espese.




Ya está lista, ahora vamos a conservarla para que nos dure mucho tiempo.



ENVASADO AL VACÍO

Esterilizamos unos botes de cristal hirviéndolos durante 10 minutos (las tapas también). Lo ideal es que uses botes de diferentes tamaños, así podrás  escoger la ración que quieras comer ese día.




Con la salsa aún caliente rellenamos al máximo los botes de cristal.




Y los dejamos boca abajo durante 24 horas.



Listo para guardar, estarán intactos durante semanas e incluso meses, yo los guardo en la nevera porque tengo espacio, pero también puedes guardarlos en la despensa.

Eso si, una vez abierto el bote, si lo debes guardar lo en la nevera y consumirlo en un máximo de 3 ó 4 días.


Recuerda, si estás haciendo la dieta Dukan, puedes consumir esta salsa diariamente: los días de P.V a voluntad y los días de P.P como condimento, tomando máximo una cucharada sopera al día.



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viernes, 30 de octubre de 2015

JAMONCITOS DE POLLO ASADOS




Los jamoncitos de pollo son una receta Dukan perfecta para toda la familia; es un plato ideal si eres la única persona en casa que hace la dieta y no tienes ganas de cocinar más de un menú.

Fácil, rápido y sin ensuciar.

Dispones los jamoncitos de pollo en una fuente para horno y los condimentas con las hierbas que más te gusten, yo he puesto ajo en polvo, pimienta, tomillo, sal y una pizca de curry.



Metes la fuente en el horno a 180 grados, 20 minutos por cada lado o hasta que queden a tu gusto, quizás necesites más tiempo.  El calor, la grasita de la piel y las especies harán el resto.

*Yo lo he puesto en mi freidora sin aceite Cecofry, 30 minutos por cada lado.

Los emplatas y a disfrutar.



Recuerda que aunque sea casi un sacrilegio, si sigues la dieta Dukan no puedes comerte la piel del pollo.





¡La comida está servida!

jueves, 8 de octubre de 2015

BOCADILLO DE CHORIZO SIN REMORDIMIENTOS.

Sí, he dicho bocadillo, sí, he dicho chorizo y sí, he dicho ¡¡¡sin remordimientos!!!!




Este bocadillo es un verdadero manjar para los sentidos; el chorizo se lo compré a Consuelo de De Crucero con Dukan. Consuelo ha hecho un pacto con su carnicero el cual le prepara estos deliciosos chorizos, aunque por el sabor de los mismos se diría que el pacto lo ha hecho con el mismísimo demonio.

En este caso los chorizos están cocinados a la plancha pero se me ocurren múltiples combinaciones: para alegrar una boloñesa, tortilla de chorizo, con fideos konjac...

El pan de hamburguesa es de la tienda de Julycar Vida Sana by Julycar donde hay una sección especialmente dedicada a productos Dukan y es realmente uno de los mejores descubrimientos Dukan que he hecho, lo cierto es que no parece que sea Dukan puesto que no se notan los salvados (el salvado de avena tiene un sabor peculiar que no gusta a todo el mundo).

Los panecillos de Julia te salvan de un apuro si no te apetece cocinar o si quieres llevártelos de excursión, se mantienen impecables en el congelador y simplemente con un golpe de tostadora vuelven a estar como el primer día.

Juzgad vosotros mismos.



Bon appetit!


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miércoles, 15 de julio de 2015

COCA VALENCIANA DE CEBOLLA.

La Coca es una receta muy típica de la cuenca mediterránea que puede consumirse dulce o salada.

En su versión salada podríamos decir que es prima hermana de la pizza con algunas diferencias, siendo la principal que en la coca no se usa el ingrediente estrella de la pizza: el queso.


Dejadme que os presente mi adaptación Dukan de la coca Valenciana de Cebolla.





Existen muchas variedades de cocas, ya que esta solía ser una comida de aprovechamiento (se aprovechaban las masas de pan que no habían subido) además de ser una manera muy cómoda y rica de comer verduras de la huerta y pescados en salazón.


Aquí os presento una coca muy sencilla con apenas dos ingredientes básicos, el huevo y la cebolla, que al combinarlos quedan suaves, deliciosos y con el punto dulzón que aporta la cebolla asada.




Veamos su elaboración paso a paso:

Ingredientes:

  • 2 Cucharadas de Salvado de Avena.
  • 1 Cucharada de Salvado de Trigo
  • 1 Cucharada de Levadura de Cerveza.
  • 1 Cucharada de Gluten de Trigo
  • 1 pizca de levadura Royal
  • Cebollas
  • Huevo
  • Sal



El primer paso es conseguir una masa que se asemeje a la base de la coca tradicional pero sin emplear harinas, para ello mezclamos los salvados con las levaduras, el gluten y una pizca de sal, y le añadimos agua hasta formar una masa homogénea.





Asamos las cebollas cortadas en juliana para conseguir que queden blanditas, doradas y dulces.
Como no usaremos aceite (si acaso unas gotitas) podemos asarlas gratinándolas en el horno y vigilándolas muy mucho  para que nos se nos quemen, otra opción es cocinarlas en una sartén antiadherente a fuego muy bajo y añadiendo unas gotitas de agua de vez en cuando, para conseguir que no se nos peguen y no se nos quemen.


En mi caso he usado mi Cecofry, una fantástica freidora dietetica que puede ser usada sin aceite.





Con nuestra masa de salvados y nuestras cebollas asadas, nos disponemos a montar la coca.




Damos forma rectangular a la masa y la cocemos a 180ºC durante unos 15-20 minutos en el horno previamente precalentado, aunque el tiempo depende mucho de vuestro horno.

Yo he usado mi pizzamaker (adoro los gadgets) ya que con estos calores no me apetecía encender el horno y el resultado es igual de bueno y energéticamente mucho más sostenible.










Una vez horneada la masa, le añadimos la cebolla asada y un par de huevos batidos y lo ponemos en el horno a gratinar durante unos minutos, si tenéis pizzamaker, seguís con la pizzamaker.



Como veis  al echar los huevos batidos por encima de la cebolla,  se me han derramado  fuera de la coca, no pasa nada puesto que una vez el huevo cuaje será muy fácil retirar los sobrantes.



Y esto es todo, aquí tenemos una deliciosa Coca Dukan de Cebolla.





Otra sugerencia de presentación puede ser cortar la coca en tiras,de esta forma resulta ideal para un picoteo Dukan o para una noche de fútbol, de peli o de final de reality.





Al plato final, le he añadido un chorrito de aceite acalórico Ordesa por encima para conseguir un resultado brillante y jugoso. También podéis añadirle un poquito de orégano para un aroma aún más mediterráneo.


Espero que os haya gustado y que la disfrutéis.





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viernes, 3 de julio de 2015

INDULGE YOURSELF - MÍMATE - HELADO DE CHOCOLATE LISTO PARA TOMAR


Estar a dieta no significa vivir de lechuga y aire y justo por eso es que la dieta Dukan resulta tan llevadera: hay infinidad de postres que puedes hacerte, flanes, helados, bizcochos....  aunque no siempre tienes tiempo ni ganas de andar por la cocina.

Para mi uno de los mayores placeres de una tarde de Domingo consiste en leer un libro, ojear una revista o ver una película en la tele mientras me como un helado de chocolate cucharada a cucharada, deleitándome con su sabor, paladeando la cremosidad del helado y disfrutando con el aroma del cacao, un capricho fácil y accesible aunque estemos o vivamos a dieta.

Os quiero presentar mi capricho de chocolate, estoy súper contenta de haberlo descubierto, lo venden en Carrefour, no tiene azúcar ni apenas grasas puesto que está hecho con cacao desgrasado y leche desnatada y cuando repasé su lista de ingredientes no encontré nada que me hiciera dejarlo de nuevo en su estantería ( lo más peliagudo puede ser que contiene grasa de coco pero creo que debe ser una cantidad mínima puesto que el helado entero solo contiene 3.1gr de grasa por cada 100 gramos y el Dr. Dukan hace unos años autorizó como tolerado la leche de coco que contuviera como máximo un 15% de materia grasa).

Este es el responsable de mi placer:



Ingredientes:

Agua, edulcorantes: Lactitol- xilitol- acesulfamo potasico- aspartamo, leche desnatada en polvo, agente de carga: polidextrosa, grasa de coco, cacao magro en polvo 5%, emulgente: mono- y diglicéridos de acidos grasos de palma y de colza, estabilizadores: goma garrofín y goma guar. Puede contener trazas de huevo y frutos de cáscara.

Por cierto también hay de sabor vainilla, pero la vainilla nunca ha sido santo de mi devoción.


¡Mañana es Domingo!


P.S Este post no está patrocinado, pero si el señor Carrefour quiere enviarme a mi casa un cargamento de helados de chocolate, no les haré un feo.





MINI BURGERS




Las mini burguers son una maravillosa opción para una cena informal o para un picoteo dukaniano, si las hacéis muy pequeñitas incluso sirven como aperitivo antes de una cena más elaborada.





Su elaboración no tiene ningún misterio, son socorridas y se hacen en un plis sin apenas ensuciar la cocina.


INGREDIENTES:

  • Pan de Julycar (receta aquí)
  • Carne de Ternera
  • Huevo, pimienta, especias.
  • Salsa de Soja SIN AZÚCAR (yo, Kikkoman)
  • Ketchup light
  • Cebolla morada



Con el pan de Julycar hacemos unos 15 bollitos que adornamos con semillas de sésamo.


Los congelamos por ejemplo, de tres en tres.





El día que queramos hacer nuestras mini burguers, sacamos un paquetito de tres bollos del congelador.





Mientras se descongela el pan, hacemos las mini burguers mezclando la carne de ternera picada con un huevo, pimienta y unos chorritos de salsa de soja sin azúcar.





Formamos mini hamburguesas de carne encima de una placa de horno y horneamos hasta que estén al punto.





Por último montamos las miniburguers con un poco de ketchup light y unas rodajas de cebolla morada (si aprovechais el calor del horno para tostar el pan, éste queda mucho más rico). Como veis en la foto, yo las he puesto con un palillo largo para que no se me desmoronen y para darles además un toque festivo.


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P.S Aunque parezca que hacer fotos a una hamburguesa no tenga ningún misterio, cuando tienes una personita en casa dedicándose a boicotear tu platos, a jugar con los tomates cherry y a desmontar las mini burguers, la misión se convierte en toda una odisea, a las pruebas me remito:





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